Un homenaje a la trayectoria de la sombrerera prodigiosa, Reyes Hellín, se ha celebrado en la Cámara de Comercio de Sevilla. Un evento llevado a cabo por la fabulosa iniciativa de los alumnos del Máster en Comunicación y Marketing de Moda que se ha basado en una pequeña exposición de algunas de las piezas de la amplísima carrera de Reyes.
Paloma Cuevas, Nieves Álvarez, Vicky Martín Berrocal, Carmen Tello, Laura Ponte, Carolina Herrera, Naty Abascal, Eva González o María León son algunas de las mujeres españolas que han confiado en las manos de la diseñadora para vestirse “por la cabeza”. Reyes empezó estudiando marketing y pasando tiempo en ciudades como Nueva York, París, Londres y Florencia para su especialización. Es bien conocida como la sombrerera prodigiosa por su distinguido recorrido. Su primer trabajo fue para una empresa de diseño, hasta que su inesperado encuentro con el “quizás mejor sombrerero vivo”, Philip Treacy, cambió su vida laboral y personal.
Dicen que su relación con los sombreros comenzó con una historia de amor. Una historia que surge en su viaje de novios, momento en el que Hellín se compró su primer sombrero, su primer Philip Treacy, buscando algo que le sirviera para todo el viaje y le evitara estar en constante preocupación de arreglarse el pelo. Sin saber que se trataba de la ubicación indicada y del momento oportuno, Reyes entró en una tienda de Londres ocasionando un antes y un después en su destino de una forma tan favorable como inesperada.
Fue en aquel entonces cuando empezó su amistad con el célebre sombrerero a quien invitó a conocer Sevilla. Se podría decir que la capital hispalense consiguió forjar una relación de amistad íntima entre Treacy y Hellín que conllevó una relación laboral. El sombrerero irlandés de alta costura, reconocido por tener entre sus clientes a toda la familia real y la aristocracia inglesa, aceptó desde el principio la condición indispensable de Reyes: tener su tienda en Sevilla. De este modo y desde su salón sevillano, se comercializaron en España estos diseños en exclusiva.
En aquella época no había en esta ciudad ninguna tienda de sombreros de alta costura, por lo que el salón de Reyes se convirtió en una visita habitual para todas las mujeres que querían algo diferente, tanto en su vida cotidiana como para eventos más formales como bodas, bautizos, comuniones y otros actos que requerían de este toque de sofisticación. Cabe mencionar que Teófilo Comunicación, a través de su línea editorial, editó el libro “Sombreros para Reyes Hellín” con prólogo del periodista Carlos Herrera y epílogo de Carmen Valiño, en el que Reyes narra sus primeros pasos en el mundo de la moda y los sombreros e incluye consejos sobre cuándo y cómo llevar un sombrero o un tocado.
se trata de una oda a la historia de la sombrerera sevillana, considerada figura emblemática para la moda española. En reconocimiento, tanto a su labor dentro de la casa Philip Treacy como por su propia producción, Reyes Hellín ha protagonizado en esta mencionada cita una conversación como anfitriona en la que ha dialogado con las distintas personalizades que acudieron al lugar.
Este evento no ha sido casualidad y se ha celebrado con motivo de una de las más grandes y conocidas festividades de la capital hispalense, considerando que la semana de vísperas a la Feria de Abril era el momento oportuno y la coordenada temporal clave para festejar esta impecable trayectoria profesional. Además, han sido expuestos los sombreros más relevantes acompañados por recortes de prensa, textos explicativos y otros elementos que contextualicen cada una de las piezas mostradas. Una exposición en la que los invitados también han podido disfrutar de música en directo, en concreto, un pianista que junto a una cantante amenizaron la estancia.
Texto: Carlota Acuña Ruano
Fotos: Alex del Campo